“Cada vez que corresponda vamos a hacer ver nuestra mirada”: Lautaro Carmona

Frente a recientes episodios controversiales y polémicas con el Gobierno y segmentos del oficialismo, el presidente del Partido Comunista dijo que “todo es parte de la normalidad del saber caminar con diferencias incluidas, cuando las hay”. Insistió en que su colectividad “tiene una convicción de pertenencia al Gobierno sin ninguna duda”. En cuanto a los sucesos en Villa Francia, planteó que alertar sobre un posible montaje “fue una prevención y preocupación” y que hoy se está conforme con la información dada por la ministra Carolina Tohá “porque nunca fue la mirada del Partido Comunista cuestionar el dispositivo ( ) de una medida de seguridad vinculado al hallazgo de armas”. Respecto a una reunión que tendrá con las ministras Camila Vallejo y Jeannette Jara, el dirigente precisó que se trata de encuentros regulares y que “no es de emergencia, no es extraordinaria, no es porque haya algún tema especial”. Sobre el áspero intercambio con la presidenta del PS, Paulina Vodanovi, expresó que le sorprendió que “a través de un medio especulara sobre la convivencia interna del PC y asignara a las posiciones públicas desde el Partido Comunista un tema interno nuestro”.

Hugo Guzmán. Periodista. “El Siglo”. Valparaíso.  ¿Están conformes en el Partido Comunista con la información que entregó la ministra del Interior, Carolina Tohá, respecto a los allanamientos y detenciones producidas el fin de semana en Villa Francia?

Estamos conformes porque nunca fue la mirada del Partido Comunista el cuestionar el dispositivo efectuado el fin de semana, desde el punto de vista de una medida de seguridad vinculado al hallazgo de armas u otra situación.

¿Se mantiene la afirmación de que pudo ser un montaje?

El tema nuestro es que había que considerar que se trataba de un operativo en un sitio vinculado a la memoria histórica, particularmente a Luisa Toledo, la madre de los hermanos Vergara Toledo asesinados en dictadura. Un espacio dedicado a la solidaridad, era un comedor popular, algo muy raro hoy, porque es de los pocos comedores solidarios que van quedando en esta selva egoísta. Nosotros pedimos consideración ante esa situación, para que nadie llegara a la conclusión de que ese operativo pudiera ser una provocación o un montaje. Fue una prevención y preocupación.

La ministra Tohá y otros personeros políticos plantearon que no se debía usar o manipular el tema de derechos humanos ante un caso que se califica como delictivo.

Eso francamente no da a lugar, por lo menos referido al Partido Comunista.

También se llamó a ser responsables con las declaraciones en torno a este caso.

Si eso es atribuible al Partido Comunista, tendrían que ser más directos y precisos y no tan genéricos. De lo contrario no nos haremos cargo de un intercambio bastante contrariado durante varios días donde hubo varias titularidades de opiniones. No veo dónde podría estar la irresponsabilidad. Si quiere pautearse lo que diga el Partido Comunista, bueno, esa es otra pretensión que no corresponde.

¿Cómo asume lo que ocurrió ayer en un punto de prensa en la Cámara Baja de legisladores comunistas, cuando dos de ellos se retiraron cuando se habló de montaje o posible montaje respecto a lo ocurrido en Villa Francia?

Lo dejo en una noticia que debe aclararse entre los parlamentarios, dentro de la bancada, y también dentro del partido, porque es algo que no está en nuestras formas de relacionarnos, tengamos grados de coincidencia o no.

En los últimos días estuvo el tema del despedido de Juan Andrés Lagos como asesor de la Subsecretaría de Interior, las críticas por el alza de tarifas en las cuentas de la luz, lo sucedido en Villa Francia y otros episodios donde salieron voces cuestionadoras desde el Partido Comunista, hubo varias controversias con autoridades del Gobierno. Se está afirmando que el PC está molestando al Gobierno, está difiriendo con el Gobierno. ¿La relación de ustedes con el Gobierno está en un punto complicado, o es fluida?

Primero, despejemos que el Gobierno es mucho más que esos temas que usted referencia y que son públicos. Lo segundo, es que el Partido Comunista tiene una convicción de pertenencia al Gobierno sin ninguna duda. Tercero, esa convicción no elude que cada vez que corresponda vamos a hacer ver nuestra mirada, no por molestar, sino por expresar un ángulo que esté presente en la política. Nunca se dijo que el ejercicio de pertenencia total incluía perder el sentido crítico.

¿Pero en este momento, la relación es complicada o es fluida?

Para mí, todo es parte de la normalidad del saber caminar con diferencias incluidas, cuando las hay. Porque así como se marcan esas cosas que usted señala, yo marcaría que tenemos una gran coincidencia en que luchemos para tener reforma previsional, tenemos coincidencia con el Gobierno para que los porcentajes de distribución permitan un pilar solidario y una redistribución de la riqueza y el arreglo de las pensiones, hay coincidencia en la política para abordar la situación de los damnificados, tenemos coincidencia en instalar el royalty minero, con la implementación de las 40 horas laborales semanales, coincidimos con fijar en 500 mil pesos el salario mínimo, puedo nombrar muchas otras coincidencias muy importantes. Y no tienen por qué apagarse o deslavarse porque en otros aspectos haya miradas distintas.

Ayer hubo un intercambio político duro entre usted y la presidenta del Partido Socialista, Paulina Vodanovic, en torno de lo ocurrido en Villa Francia y las declaraciones que se dieron. Se sumó a otras polémicas con ella. ¿Están maltratadas las relaciones del PC con el PS?

De parte nuestra no. Lo puedo demostrar en la convivencia regular que tenemos los partidos y sobre todo a nivel de presidencias. Me sorprendió que la presidenta del PS, pese a haber estado en reuniones sucesivas con presencia nuestra, a través de un medio especulara sobre la convivencia interna del PC y asignara a las posiciones públicas desde el Partido Comunista un tema interno nuestro. Eso me pareció absolutamente imprudente, no corresponde al respeto que se tienen los partidos, que pensamos distintos. Si hay una formulación de algún tipo, para eso existe el espacio bilateral.

Sin embargo, son varias las versiones que apuntan a que los episodios que se han dado últimamente expresan diferencias internas dentro del PC.

La dinámica de debate del Partido Comunista es histórica. Los que no conocen al PC piensan que hay una imposición de monolitismo o que somos gemelos en la forma de pensar. Las conclusiones del Partido Comunista es después de un debate donde hay ángulos distintos. En nuestra condición actual, además, está cursando el Congreso Nacional que pone a debate la política del partido. Hay posiciones frente a coyunturas, y desde el Partido Comunista no se está asechando detrás de un poste a ver si se provoca un problema ante tal o cual tema para explicar o justificar una diferencia. Eso sería un absurdo, casi una negación de la vida real o de no manifestar abiertamente algo del debate del partido.

¿La gente, las autoridades, los personeros políticos, la prensa, deberían acostumbrarse a que pueden haber vocerías diferenciadas desde autoridades, dirigentes y militantes del Partido Comunista?

Es que ésa es la historia del Partido Comunista. Cuando intervenía el máximo dirigente del partido, Luis Corvalán, no siempre era en el mismo tono o matiz que lo hacía, por ejemplo, Volodia Teitelboim, o el presidente de la CUT, como Luis Figueroa. Tenemos en cuenta que somos personas distintas, en tareas y misiones distintas. En lo sustantivo, en lo que define la condición de Partido Comunista y de militancia comunista, hay una diversidad que enriquece la exposición de planteamientos y no una controversia que limita o inhibe.

En lo contingente, ¿con eso usted descarta, por ejemplo, diferencias y tensiones de las ministras comunistas con la dirección del PC, con usted?

Lo que ocurre, y es público, es que las tareas políticas que les corresponden a quienes están en tareas de Gobierno, las ministras, subsecretarios, delegadas o delegados presidenciales, etcétera, tienen un espacio y una representación más allá del propio partido, y es responsable y lógico que lo implementen así. Jamás hemos pretendido que los últimos acuerdos de la Comisión Política referidos a temas de la interna del partido o sectoriales del país, los exponga una persona que está trabajando en el Gobierno, cuando la tarea de Gobierno supera lejos el desarrollo y posiciones del Partido Comunista. Es de comprensión total que son temas distintos.

Se filtró que este domingo habrá una reunión de las ministras (Camila Vallejo, Jeannette Jara), el ministro (Nicolás Cataldo), con usted, o con la Comisión Política, para tratar diferencias o situaciones de los últimos días. Si eso es real, ¿cuál sería el objetivo?

Lo primero es decir que hay una relación regular, semanal -con excepciones por las tareas propias de cada quien- con quienes son ministras, ministro, subsecretarios, con la dirección del partido. Por eso lo del domingo no es una cosa exclusiva, única, a propósito de alguna circunstancia, no, es en el contexto de reuniones regulares que sostenemos entre nosotros. Lo segundo de decirle, es que todo el partido, la bancada parlamentaria, los militantes del mundo sindical, las consejeras y consejeros regionales, compañeras y compañeros en tareas municipales, etcétera, relacionan la pauta de actualidad con tareas ineludibles y permanentes. Por ejemplo, el desarrollo de nuestro Congreso, la batalla electoral de octubre, el aporte al avance y éxito de las políticas del Gobierno, entre otras tareas. La reunión que usted menciona no es de emergencia, no es extraordinaria, no es porque haya algún tema especial.

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